Rosselló encabezó una conferencia de prensa de jefes de agencia en la que hizo público que quedan suspendidas de forma inmediata las clases y que los empleados públicos terminarán este martes su jornada laboral al mediodía, dado que se espera el impacto de Irma ya en Puerto Rico el miércoles.
Rossellló, que insistió a la población del peligro que supone el sistema, explicó que la decisión la tomó después de conocerse la determinación del NHC, que este martes emitió una vigilancia de huracán para Puerto Rico, las Islas Vírgenes de Estados Unidos y las Británicas.
El ojo del huracán Irma, de categoría 3, se sitúa según el último parte de la NHC en la latitud 16,8 grados norte longitud 53,3 grados oeste y se mueve hacia al suroeste a 22 kilómetros por hora.
Los vientos con fuerza de huracán se extienden hasta 45 kilómetros del centro y los vientos con fuerza de tormenta tropical se extienden hasta 220 kilómetros.
Hay además una vigilancia constante para las islas de Antigua, Barbuda, Anguila, Montserrat, San Cristóbal y Nieves, así como para las islas de Saba, San Eustaquio y San Martín.
El ciclón se encuentra a 980 kilómetros al este de las islas de Sotavento (Antillas Menores) con movimiento actual suroeste a 22 kilómetros por hora y, según el pronóstico, estaría el martes sobre el norte de ese archipiélago, según el informe del CNH.
Rosselló adelantó además que mañana emitirá una orden de desalojos preventivos por toda la isla para atender la situación de personas que viven en zonas inundables o en viviendas con estructuras frágiles.
El secretario de Salud, Rafael Rodríguez, informó que se activó el plan de emergencia en el Centro Médico (principal hospital de la isla), a la vez que indicó que la institución está preparada en suministros y equipos.