De acuerdo a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la deuda externa venezolana creció el año pasado 10 por ciento en relación a 2015, pero casi el doble respecto a 2009.
Sobre el Producto Interno Bruto (PIB) del país andino, significa el 21.7 por ciento, y una carga que ayuda a entender por qué en este 2017 será la única nación latinoamericana sin crecimiento.
Por el contrario, el PIB de Venezuela retrocederá 7.2 por ciento de acuerdo a las proyecciones de la CEPAL.
En ese marco, el presidente de la legislativa Asamblea Nacional, Julio Borges, indicó que el gobierno venezolano debe de escoger entre pagarla o comprar alimentos y medicinas.
De acuerdo al legislador, el gobierno venezolano está a días de enfrentar el pago de tres mil 500 millones de dólares de deuda.
El presidente Nicolas Maduro informó a principios de mes en Moscú en la VI Cumbre Mundial de la Energía, que su gobierno había pagado todos sus compromisos de capital e intereses, los cuales suman 60 mil millones de dólares.
Borges se pronunció por el refinanciamiento de la deuda externa venezolana, a fin de destinar recursos a la atención de las necesidades de la población, específicamente comida, medicias y fortalecer la producción.
Además, pidió que se abra un canal humanitario por el cual ingresen a Venezuela medicinas y alimentos provenientes de países amigos.
Ambas medidas, refinanciar la deuda y abrir un canal humanitario, generarían bienestar y la reforma completa de la economía venezola, concluyó.