A la pregunta de si consideraba despedir a Mueller, Trump respondió: "no, no lo estoy (considerando)", pero admitió que estaba muy molesto por informes de que el fiscal obtuvo decenas de miles de correos electrónicos de funcionarios durante la transición y recalcó: "no me puedo imaginar que haya algo (incriminador) en ellos".
Con esta declaración a los periodistas a su regreso de la casa presidencial de descanso de Camp David, Trump disipó versiones de que intenta deshacerse de Mueller y así terminar con la investigación sobre sus presuntos nexos con Rusia.
La versión cobró fuerza después que la representante demócrata Jackie Speier, de California, dijo a una televisora local que existía el "rumor" de que Trump despediría a Mueller a fines de esta semana, después de que los miembros del gabinete dejaran Washington por el descanso de Navidad. Mueller fue nombrado a principios de este año como asesor especial del Departamento de Justicia para investigar si miembros del equipo de campaña de Trump se confabularon con Moscú para influir en el resultado de la carrera de la Casa Blanca en 2016. La investigación federal y otras en el Congreso han sido un lastre para la agenda política del primer año de la administración Trump, lo que ha llevado a la especulación de que Trump quiere despedir a Mueller para concluir la investigación.