capital de Kenia, dejó un ataque terrorista con ráfagas de rifles AK-47 y dos explosiones en el barrio de Westlands, que causó el incendio de varios vehículos.
El jefe policial de Nairobi, Joseph Boinnet, dijo que el grupo de atacantes incluyó un suicida que hizo estallar una bomba. El hecho fue confirmado por el grupo islamista de origen somalí Al Shabab, vinculado al grupo terrorista Al Qaeda, al reivindicar el ataque a través de una llamada a la BBC.
El portavoz de operaciones militares del grupo, Abdiasis Abu Musab, dijo en un comunicado a los medios que "estamos detrás del ataque en Nairobi. La operación continúa. Daremos detalles más adelante".
"Los delincuentes están refugiados en el hotel y nuestras fuerzas especiales tratan de expulsarlos", dijo un comunicado oficial. La emisora local Citizen TV informó que algunos testigos vieron a cuatro hombres armados llegar en un automóvil y entrar al complejo antes de iniciar el tiroteo.
Varios huéspedes y vecinos salieron corriendo del edificio, rodeado luego por la policía. Algunos heridos fueron llevados en camilla hacia las ambulancias que se desplazaron al sitio. En las redes sociales fueron publicados algunos videos filmados por ciudadanos en las cercanías.
Los residentes de la zona fueron evacuados de los edificios adyacentes y las fuerzas especiales kenianas se desplegaron rápidamente sobre el terreno. Un testigo afirmó que escuchó disparos y comenzó a ver gente que huía y levantaba las manos, algunos se metían en la orilla del río para salvar la vida.
Las autoridades no han podido de momento dar un número oficial de heridos y muertes. El Ministerio de Exteriores de Kenia confirmó que un español residente en Nairobi resultó herido en el ataque, pero no de gravedad.