"Celebramos que el señor Spears y su abogado hayan admitido en una declaración que debe dejar su puesto", dijo el abogado de Britney Spears, Mathew Rosengart, en un comunicado.
Spears, que ha controlado los asuntos de su hija desde que ella sufriera un problema de salud en 2008, acordó dar un paso al costado en un documento judicial presentado este jueves.
Britney Spears, de 39 años, llevaba meses intentando que su padre deje de tener nada que ver con sus asuntos. Su petición iba a ser escuchada en un tribunal de Los Angeles a final de septiembre.