en los crímenes de comunicadores a nivel mundial y que hubo un incremento de los crímenes de mujeres periodistas.
Los asesinatos de periodistas en el mundo quedan impunes en la gran mayoría de casos, lamentó el miércoles (02.11.2022) la Unesco, que pidió a los dirigentes mundiales medidas para reforzar los medios para investigar y condenar a los responsables.
"Según los nuevos datos de la Unesco, la tasa de impunidad mundial para asesinatos de periodistas se eleva al 86%", indica la organización de la ONU para la educación, la ciencia y la cultura.
Aunque suponga una reducción de nueve puntos en los últimos diez años, es "muy insuficiente para frenar la espiral de violencia", dice la Unesco.
En el periodo de 2020-2021, 117 periodistas fueron asesinados por su profesión, lo que supone la cifra más baja desde la primera publicación de este informe en 2008.
Sin embargo, la Unesco señala que en 2022 ya fueron asesinados 66 periodistas hasta el 30 de septiembre.
En los dos años anteriores, las regiones más mortíferas para los periodistas fueron América Latina y Caribe y, en menor medida, Asia-Pacífico.
-Aumenta crímenes de mujeres periodistas
Por contra, en 2020 no se produjo ningún asesinato de periodistas en Europa Central ni Europea del Este por primera vez desde 2007.
La paradoja es que solo un 36% de las víctimas de 2021 murieron en países con conflictos armados.
El informe también destaca un aumento de los periodistas muertos en disturbios o manifestaciones: seis en el periodo 2020-2021 contra tres en el periodo 2016-2017.
La Unesco subraya que 91 de los 117 periodistas asesinados en 2020-2021 murieron fuera del horario laboral en su domicilio, en su coche o en la calle, pero sin estar en ninguna misión específica. Varios fueron asesinados delante de su familia, incluidos menores.
Además, el número de mujeres periodistas se dobló en 2021, pasando del 6 por ciento el año anterior al 11 por ciento.
Ante estas cifras, la Unesco renovó su llamada a tomar todas las medidas necesarias para que los crímenes cometidos contra los periodistas sean objeto de investigaciones apropiadas y que sus autores sean identificados y condenados.