Gobierno alemán la confirmara oficialmente: Alemania entregará tanques de combate Leopard 2 a Ucrania. Un "enorme éxito diplomático” para Scholz, dijo Katja Mast, líder parlamentaria del partido SPD.
Sobre las acusaciones de que Scholz había dañado la reputación de Alemania con su actitud vacilante, Mast apunta que se trataba de evitar que Alemania actuara en solitario "y no permitir que la OTAN se convirtiera en partido de la guerra”. Las críticas al canciller son "completamente inapropiadas”, considera.
Por su parte, Estados Unidos no quería enviar carros de combate a Ucrania, pero ahora ha decidido también hacerlo. La idea es que Olaf Scholz tenía todo bajo control, que sabía lo que hacía. Tenía un plan, quería que EE. UU. se subiera al barco, y se negó a dejarse influenciar por el debate de la opinión pública y las críticas. Mast subraya que el factor decisivo para el canciller es el juramento de su mandato de "evitar daños al pueblo alemán".
Se trata del envío por parte de Alemania de dos batallones de tanques de combate Leopard 2. Un batallón del Ejército alemán comprende 44 tanques, es decir, que se envían 88. Otros socios europeos enviarían por su parte también tanques Leopard 2. La capacitación de las tropas ucranianas comenzaría en breve en Alemania, junto con la logística, la provisión de municiones y el mantenimiento.
- Tanques Abrams de EE.UU -
EE. UU. planea enviar más de 30 tanques de combate Abrams, pero estos tardarán "meses" en llegar a Ucrania, según dijo una funcionaria estadounidense a la prensa. Es improbable que esos vehículos de combate lleguen en los primeros meses de 2023 a Ucrania, lapso en el que se prevé una ofensiva de Rusia y una contraofensiva de Ucrania para reconquistar territorios ocupados por los rusos, informó el *Washington Post*.
EE. UU. siempre enfatizó que no consideraba sensato un despliegue de Abrams por razones prácticas. Ucrania no recibiría ningún material militar que "no pueda reparar, no pueda mantener y no pueda pagar a largo plazo", señaló el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin.
Pero Scholz no actuó en correspondencia con eso, sino que lo hizo por principio: lo que quería era una señal política de EE. UU. Al contrario del material de guerra de proveniencia rusa, con el que aún cuentan los países europeos y la OTAN, el origen de los tanques Leopard 2 está claro: se producen en Alemania y el Gobierno alemán debe dar su visto bueno si un tercer país quiere entregarlos.
- ¿Nueva escalada en la guerra? -
Está por verse en qué medida Rusia considera este paso de Alemania un nuevo nivel de escalada en la guerra, y cómo reaccionará, dice a DW Erica-André Martin, del Instituto Francés de Relaciones Internacionales (IFRI). "Los rusos podrían ser de la opinión de que Alemania está al tanto de cada paso que se da y que está involucrada en cada entrega", advierte.
De hecho, el embajador ruso en Alemania, Serguei Netschajev, escribió en Telegram que el envío de los Leopard 2 "llevará al conflicto a un nuevo nivel de confrontación". El diplomático también dijo que, con este envío, Alemania no cumple con su responsabilidad histórica por los crímenes nazis.
- Intervención de Scholz en el Bundestag -
El canciller alemán, Olaf Scholz, hizo declaraciones este miércoles (25.01.2023) ante el Parlamento y respondió a las preguntas de los diputados. Scholz subrayó que es correcto e importante que los "sistemas de armamento altamente efectivos" se pongan a disposición solo en estrecha cooperación con los socios internacionales. Y se trata, sobre todo, de evitar que los riesgos para Alemania "crezcan en la dirección equivocada". El canciller también pidió a los ciudadanos que confíen en el Gobierno.
El presidente estadounidense, Joe Biden, afirmó, por su parte, que su país y Europa "están completamente unidos" para ayudar a Ucrania a defenderse de la invasión rusa. Scholz añadió en Berlín que es "correcto y totalmente intencional" que "hayamos dado estos pasos poco a poco", y "no nos hayamos dejado llevar". Por su parte, Rolf Mützenich, líder del grupo parlamentario del SPD, destacó que "todos los juicios precipitados se evaporan en el aire. Alemania no está frenando nada, ni está aislada", escribió Mützenich en una carta a los miembros socialdemócratas del Bundestag.