"La situación en Rusia es crítica. Nos estamos acercando a lo que ocurre en África", advirtió el jueves el director del Centro federal ruso de lucha contra el sida, Vadim Pokrovski, durante una rueda de prensa con motivo del Día mundial de la conmemoración de las víctimas del sida, el próximo domingo.
En 2012 se registraron 69.849 nuevos casos en Rusia, o sea 12% más que en 2011 (62.384 casos) según las cifras oficiales rusas.
El número de decesos provocados por el sida en Rusia también ha seguido aumentando, pasando de 18.414 en 2011 a 20.511 en 2012, lo que representa un incremento de 11,4%.
"No tenemos estrategia nacional alguna de lucha contra el sida. El Estado gasta 19.000 millones de rublos (470 millones de euros) anuales para el diagnóstico y el tratamiento de las personas que han contraído ya el virus del sida, y sólo 200 millones de rublos (5 millones de euros) para los programas de prevención", recalcó Pokrovski.
El aumento del número de decesos en Rusia está ligado al hecho de que con frecuencia los seropositivos comienzan el tratamiento antirretroviral "demasiado tarde", ya que los médicos son reticentes a recetar medicamentos que son demasiado caros, explicó Pokrovski.