y granadas propulsadas por cohetes fuera de la cárcel.
Asimismo, Jadun ha añadido que al menos doce personas murieron en el ataque, incluidos seis agentes de policía, y que los atacantes cortaron la electricidad antes de acceder al recinto penitenciario.
De acuerdo con la BBC, las autoridades habían recibido una alerta de los servicios de Inteligencia en la que se hablaba de un ataque inminente, pero un responsable de la prisión, aseguró que no lo esperaban tan pronto.
El grupo insurgente Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP), conocido como los talibán paquistaníes, han reclamado este martes la autoría del ataque, según ha indicado el diario paquistaní 'Dawn', que previamente cifró en alrededor de 45 el número de milicianos de alto nivel que habían logrado fugarse de la cárcel.
La prisión alberga a unos 5.000 reclusos entre ellos miembros talibán y milicianos de grupos prohibidos como el suní Lashkar-e-Jhangvi (LeJ). Los enfrentamientos se han extendido también durante la madrugada y las autoridades han impuesto un toque de queda para toda la ciudad, situada unos 320 kilómetros al oeste de Lahore.
Además de la cárcel, el asalto también ha derivado en la toma de una casa cercana y de un hospital. En ambos casos, los atacantes han utilizado a los civiles como rehenes en su lucha contra las fuerzas de seguridad, a las que han tendido varias emboscadas en las inmediaciones