La tormenta invernal "Hércules", que empujó fuertes nevadas desde el nordeste del país a finales de la semana pasada rompió récords en vastas áreas de Estados Unidos. Sin embargo, las temperaturas comenzaron a estabilizarse e inclusive bajaron en algunos de los 32 estados donde aún está vigente la declaración de "estado de calamidad".
Hoy hubo cielo despejado y se cancelaron 1.700 vuelos, una cifra bastante menor a la de ayer, cuando fueron cancelados 2.500. El frío, que acentuado por el viento llevó la sensación térmica por debajo de los 40 grados bajo cero en Minnesota y Wisconsin, lo que obligó al cierre de escuelas en 14 estados del centro y nordeste del país.
El frente meteorológico polar llevó temperaturas extremas desde Boston, en Massachusetts, a Knoxville, en Tennessee, y desde Atlanta, en Georgia, a Little Rock, en Arkansas, y batió en el Parque Central de Nueva York un récord de 118 años.
El Servicio Meteorológico estadounidense anunció que habrá un alivio para los próximos dos días. "Creemos que el problema es de corta duración pero calculamos el costo (de las inclemencias) en unos 5 mil millones de dólares por el tamaño de la población afectada", dijo Evan Gold, vicepresidente de la compañía Planalytics, que hace análisis para las empresas privadas.