Según informaron hoy varios medios marroquíes, el encantador, conocido como Abdelati, estaba ofreciendo un espectáculo ante un grupo de turistas el pasado viernes cuando fue mordido por su serpiente, una cobra.
La víctima, de más de 60 años de edad, intentó sacar el veneno con su boca pero su estado empeoró y fue trasladado posteriormente al hospital Ibn Zohra, donde falleció después de que el veneno se expandiera por su cuerpo, añadieron las mismas fuentes.
La Plaza Yamaa al Fna es muy conocida por sus espectáculos callejeros, restaurantes ambulantes, cuentistas y domadores de diferentes animales.
Es habitual que los encantadores de serpientes inviten a los turistas a fotografiarse con sus animales anudados al cuello, y siempre aseguran que los reptiles han sido manipulados para inutilizar el veneno.