El accidente ocurrió la madrugada del viernes al sábado en la provincia suroriental de Hunan, en un tramo de la autovía que lleva desde la metrópolis de Shanghái (este) a la ciudad sureña de Kunming, al momento en que un camión que transportaba líquido inflamable -al parecer, alcohol- chocó contra un autobús de pasajeros con capacidad para transportar a 53 personas, lo que provocó posteriormente una explosión.
Entre los fallecidos, se encuentra el conductor del camión y un acompañante, según Xinhua, que informó de que cinco coches se calcinaron en la explosión y que el accidente provocó otras colisiones de vehículos que circulaban detrás del camión.
En fotografías que los medios de comunicación chinos comenzaron a publicar en internet se puede ver el tramo de la carretera con una gran humareda, y numerosos coches calcinados.
También se distingue el choque entre el camión y el autobús, y cómo el primero colisionó con la parte trasera del segundo.
Un ciudadano que vive cerca del lugar del suceso, Shi Shiping, relató a Xinhua cómo, de pronto, escuchó una enorme explosión a la hora del incidente.
“Fue como la explosión de una bomba atómica“, destacó Shi, quien, junto a otros locales, trató de acercarse a rescatar a la gente sin éxito a causa del grave incendio que se desató.
“Cuatro personas escaparon con quemaduras muy graves, el pelo y la ropa totalmente quemados“, explicó Shi.
El fuego se logró extinguir a primera hora de la mañana del sábado.