"Es momento de que el régimen del presidente Asad ponga por delante a su pueblo y considere las consecuencias de sus acciones, que atraen a más y más terroristas a Siria con el fin de derrocarlo", dijo Kerry en Ginebra, tras reunirse con el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura.
Kerry llegó a Ginebra para reunirse con su homólogo de Irán, Mohamad Yavad Zarif, y explorar con él las posibilidades de impulsar las negociaciones internacionales sobre el programa nuclear iraní.
Antes de su encuentro con Zarif, Kerry recibió a De Mistura, quien organiza con el auspicio de Rusia una reunión entre representantes del Gobierno de Damasco y la oposición, este fin de mes en Moscú.
Kerry le transmitió que EEUU apoya su esfuerzo para que la situación se mueva en una dirección positiva en Siria y, en particular, su plan concreto de empezar por un paso concreto en Alepo (norte sirio).
El plan que el enviado de la ONU propone es instaurar zonas de alto el fuego, inicialmente en Alepo (la segunda ciudad más importante de Siria), para hacer posible la entrada de ayuda humanitaria destinada a la población.
De Mistura negocia ese plan desde fines del año pasado con el régimen de Al Asad y con representantes de la oposición, para lo cual retornará a Siria la próxima semana.
El representante de la ONU dijo que apreciaba el encuentro con Kerry porque existe la impresión de que la crisis de Siria ha perdido interés entre las grandes potencias y la comunidadinternacional en general.
"Ahora usted me confirma que no es así. Yo seguiré impulsando (el plan) por Alepo porque (esta ciudad) se ha convertido en un lugar de donde se puede empezar a dar señales positivas", sostuvo.
"En otras palabras, que los bombardeos, los ataques con barriles (repletos de explosivos lanzados desde el aire) y con morteros pueden parar y se puede hacer llegar alguna ayuda humanitaria, lo que dará alguna esperanza al pueblo sirio", agregó, dirigiéndose a Kerry -quien se mostró de acuerdo con esas palabras- en una breve declaración a la prensa.