“Los S-300 ya no se fabrican. Hemos ofrecido a Irán los Antey-2500. Lo están pensando. Aún no se ha tomado una decisión”, dijo el director general de la corporación estatal de defensa Rostec, Serguei Chemezov, desde Abu Dhabi, donde asiste a un evento internacional de armas.
Chemezov explicó que los Antey-2500 “son una versión modificada de los S-300”, que Rusia debería haber suministrado a Irán en virtud de un contrato firmado en 2007.
Aquel suministro de armas fue suspendido después de que en septiembre de 2010 el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas impuso sanciones contra Teherán por su polémico programa nuclear..
Después de la decisión rusa de suspender la venta de los misiles S-300, Irán recurrió a los tribunales, incluso pedía una compensación de cuatro mil millones de dólares ante el tribunal de arbitraje de Ginebra.