Desde el oficialismo, el presidente del Partido Comunista (PC), Guillermo Tellier, señaló: "Confiamos que la presidenta mantenga el rumbo de las reformas y que se refuerce el cumplimiento del programa (...) el cambio de ministros tiene esa expectativa en la ciudadanía. Pensamos que tanto los partidos de la Nueva Mayoría como el movimiento social deben defender el proceso de reformas en curso".
En tanto, para el presidente de la Democracia Cristiana, Jaime Pizarro, el anuncio es una señal que puede ayudar a recuperar la confianza ante la crisis política generada por los escándalos de corrupción.
"Vamos a colaborar en todo lo que ella nos pida. La facultad de poner, de cambiar, sacar o mantener a los ministros es de ella. A mí me parece muy oportuno y creo que la señal que se entrega al país puede ayudar a generar condiciones para que avancemos seriamente, sobre todo en materia de recuperar confianza y credibilidad", sostuvo.
Desde la otra vereda, el presidente de la derechista Unión Demócrata Independiente (UDI), Hernán Larraín, reconoció que la noticia lo tomó por sorpresa, "es prudente que la presidenta haga las evaluaciones, ella tiene la oportunidad de hacer un cambio significativo. Por lo tanto, hay que esperar y luego evaluar las decisiones que tomará".
El presidente de Renovación Nacional, aliado de la UDI, Cristián Monckeberg, espera que este cambio en el gabinete pueda realizarse antes del plazo señalado, "la presidenta con su nuevo gabinete debería recuperar su agenda, y los cambios deberían concretarse lo más rápido posible, ojalá en las próximas 24 horas", indicó.
Desde el Palacio de La Moneda no han entregado mayor información de qué ministros podrían quedarse y cuales irse, salvo la ratificación en el cargo del canciller Muñoz, quien se encuentra en La Haya defendiendo la postura chilena frente a la demanda boliviana por una salida soberana al mar.