El peor atentado en suelo estadunidense desde los ataques del 11 de septiembre de 2001, perpetrado por el estadunidense de origen afgano Omar Seddique Mateen, de 29 años, fue cometido en medio de la velada “Noche Latina” de la discoteca Pulse, de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales (LGTB).
De acuerdo con el director de la Facultad de Derecho del Miami Dade College (MDC), Raymundo Socorro, este fue un crimen de odio, pero también estaban involucradas las creencias ideológicas del islam. “Los dos conceptos tienen aplicación”.
“Lo que pasó en Orlando no es diferente de lo que ocurrió el 11 de septiembre de 2001 en términos de motivación de odio y de creencias ideológicas”, indicó Fonseca.
Según Fonseca, cada vez se van a ver más de estos “lobos solitarios” que actúan por cuenta propia, debido a sus creencias y a la información que reciben vía internet, pues la lucha de organizaciones como el EI y Al Qaeda se ha trasladado a las redes sociales, y Estados Unidos “está perdiendo esa batalla”.
Fonseca advirtió que si no hay políticas más estrictas en el acceso de armas de alto poder como las utilizadas en Orlando y San Bernardino, ese tipo de masacres seguirán ocurriendo.