votación del próximo 8 de noviembre.
Luego de consultar a expertos, el organismo señaló que el abanderado republicano llegó al tercer debate “batallando ante una percepción cada vez más negativa en su contra por sus comentarios ofensivos sobre las mujeres”.
El centro indicó que después de analizar los seis bloques en que se desarrolló el debate, es posible anticipara que el magnate no recuperará los “puntos” perdidos en las preferencias electorales, debido a sus declaraciones sobre las mujeres.
Señaló que al evaluar ocho análisis distintos, existe la coincidencia de que la candidata republicana tiene más probabilidades de ganar la elección del 8 de noviembre.
Señaló que según el diario The New York Times, el debate consolidó el avance de Clinton, que registró una probabilidad de ganar del 92 por ciento.
En una nota coyuntural titulada: “Tercer y último debate presidencial se lleva a cabo mientras la ventaja de Hillary Clinton se consolida hacia el 8 de noviembre”, el Centro manifestó que la candidata llegó a ese ejercicio con una ventaja de más de seis puntos en las preferencias a nivel nacional.
Indicó que en Estados Unidos, también se “especula” sobre la posibilidad de llegar a la Presidencia, el Partido Demócrata podría recuperar el liderato en las dos cámaras del Congreso norteamericano.
Recordó que el debate se desarrolló en seis bloques, uno dedicado a la Suprema Corte de Justicia; qué rumbo dará quien resulte ganador a esa instancia jurisdiccional, que analiza entre otros asuntos, temas de relevancia internacional como la portación de armas, migración, pena de muerte y derechos reproductivos de las mujeres.
También se abordó el tema de la migración, la deportación de miles de mexicanos, las declaraciones denigrantes del candidato Trump sobre los mexicanos indocumentados y su polémica visita a México.
En el tema económico, se abordaron asuntos relativos a las propuestas fiscales de los republicanos y los demócratas, el Tratado de Libre Comercio y el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP).
Los candidatos también respondieron preguntas sobre el Estado Islámico (ISIS), la relación con Rusia, la situación en Siria; respecto a sus respectivas fundaciones; a la Ley de Salud presentada por el actual Presidente, Barack Obama; y la deuda pública.
El Centro también destacó momentos “controversiales” del tercer debate, como el momento en que Trump llamó a Clinton “nasty woman” o mujer desagradable; y cuando el abanderado republicano optó por dejar en suspenso su respuesta en cuanto a si aceptaría o no los resultados de la elección.