la Fuente, condenó los ataques rusos en un centro comercial en Kremenchuk, Ucrania y, dijo: "Urge parar la guerra".
En sesión del Consejo, De la Fuente reprobó los ataques en contra de un centro comercial ucraniano, en donde hubo al menos 18 personas muertas.
"Condenamos el ataque de ayer a un centro comercial en Kremenchuk, en el que se encontraba un numeroso grupo de personas, de civiles. Aun no se tiene el saldo final, pero hasta ahora al menos 18 muertos y decenas de heridos, lamentable", aseveró.
"Un ataque de esta naturaleza es contrario al derecho internacional, respaldamos el llamado del coordinador humanitario para Ucrania en el sentido de iniciar sin dilación una investigación independiente sobre estos hechos", agregó sobre el suceso.
Asimismo, señaló como "injustificables" los bombardeos en áreas residenciales en múltiples poblaciones en Donbás. "Han destruido infraestructura critica de comunicaciones y servicios. Han afectado gravemente la provisión de servicios esenciales de salud, así como el acceso a varias ciudades de la región".
De igual manera, expresó: "Hacemos un llamado urgente para que se permita el acceso seguro e irrestricto a todo el personal que presta ayuda humanitaria".
"Preocupa sobremanera la proliferación de armas en la región. Se trata de un factor de volatilidad adicional pues su creciente disponibilidad en manos de población civil, propicia la continuación de los conflictos", añadió De la Fuente.
Finalmente, urgió a la mediación y el diálogo que lleven a un cese al fuego total. "Urgen la mediación y el diálogo que lleven a un cese al fuego total, incrementar las pausas humanitarias que garanticen la evacuación segura y voluntaria de la población y encontrar mecanismos para movilizar granos, fertilizantes y otros insumos básicos, que se encuentran confinados por la guerra y que aumentan las precarias condiciones de insuficiencia alimentaria en otras partes del mundo".