Oriente Medio del presidente estadounidense, Joe Biden, pues consideran que el mandatario aboga por los intereses israelíes en detrimento de los palestinos.
“No hay saludo ni bienvenida para el presidente de Estados Unidos”, declaró Jalil al Haya, líder en Gaza de Hamás, el movimiento islamista que gobierna de facto la Franja desde hace 15 años.
Junto a él, cientos de palestinos se reunieron en la plaza del Soldado Desconocido, en el oeste de la ciudad de Gaza, ondeando sus banderas y coreando eslóganes contra Biden.
"Su gobierno siempre ha estado sesgado hacia la entidad sionista y siempre ha negado los derechos legítimos de nuestro pueblo", aseguró Al Haya.
Biden llegó el miércoles a Israel para una visita de tres días, en el marco de una breve gira por Oriente Medio que lo llevará también a Cisjordania el viernes y luego a Arabia Saudí.
Israel y Estados Unidos firmaron una declaración que reafirma sus “lazos inquebrantables” y Biden recibió la Medalla de Honor Presidencial “por su verdadera amistad con el Estado de Israel y el pueblo judío”.
Para Al Haya, esa declaración “es una confirmación flagrante de la injusta política de Estados Unidos contra el pueblo palestino y representa una nueva promesa a la ocupación israelí", que ha provocado “el despojo de los derechos del pueblo palestino a su patria, su religión, su economía”.
Paralelamente, en las ciudades cisjordanas de Ramala y Nablus, ocurrieron manifestaciones similares contra Biden.
Su visita “conlleva grandes riesgos para la causa palestina", pues busca “consolidar la hegemonía israelí sobre la región árabe, apoderarse de sus riquezas y privar a sus pueblos", denunció ante medios locales Isam Bakr, activista palestino.
Para Azam al Ahmad, del partido Fatah que lidera el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, la visita de Biden es “demasiado breve, no es posible debatir cuestiones fundamentales. Es más protocolaria que política".
Según Al Ahmad, la ANP y Biden no emitirán declaraciones conjuntas “debido a sus diferencias fundamentales", como el reconocimiento de Jerusalén Este como capital de un futuro Estado palestino o la promesa incumplida de reabrir el consulado estadounidense en la ciudad, que cerró el expresidente Donald Trump (2017-2021).
En los últimos meses, la ANP ha criticado a Estados Unidos por estas cuestiones y por considerar que no presionó a Israel para frenar su expansión colonial en territorio ocupado, pese a que el dirigente estadounidense se ha opuesto formalmente al crecimiento de colonias judías en Cisjordania y Jerusalén Este.
Este jueves, Biden aseguró que aún ve la solución de dos Estados como la más viable para el fin del conflicto palestino-israelí, aunque su gobierno estableció que durante su gira no hará ninguna propuesta "formal" para reactivar el proceso de paz.
El presidente hizo estas declaraciones antes de reunirse mañana en la urbe cisjordana de Belén con Abás, y visitar vez el hospital Augusta Victoria en Jerusalén Este ocupado.
Se espera que el mandatario estadounidense anuncie una nueva financiación y una serie de iniciativas humanitarias para los palestinos.