respectivamente, hablaron por teléfono ayer y acordaron seguir trabajando para lograr la extradición del narcotraficante Rafael Caro Quintero, responsable del asesinato de un agente de la DEA en 1985.
El enlace telefónico fue confirmado por el Departamento de Justicia del país vecino. Caro Quintero fue detenido la semana anterior por elementos de la Secretaría de Marina (Semar).
El lunes pasado, un juez concedió un amparo al capo para evitar que sea entregado a las autoridades estadounidenses antes de que haya concluido el procedimiento de extradición y determinó que debe permanecer donde se encuentra ahora, una cárcel de máxima seguridad ubicada en el Estado de México.