La Unión Europea condenó el tiroteo de un exalumno de una escuela rusa de Izhevsk, en los Urales, donde la cifra de víctimas aumentó a 17 muertos y 24 heridos el lunes (26.09.2022).
"La UE condena el tiroteo en una escuela en Izhevsk y expresa sus sentidas condolencias a los familiares y amigos de las víctimas del trágico acontecimiento", dijo el portavoz de Exteriores del Servicio Europeo de Acción Exterior, Peter Stano, en su cuenta oficial de Twitter.
El atacante, identificado como Artiom Kazántsev, de 34 años y graduado en el mismo centro educativo, llegó antes del mediodía a la escuela nº 88 de Izhevsk, ciudad a 96 kilómetros al este de Moscú, en la región de Udmurtia.
Según los alumnos, mató de un tiro a uno de los guardias nada más entrar por la puerta principal. Después comenzó a desplazarse por distintas aulas.
De los 17 muertos, 11 eran niños. También son menores de edad 22 de los 24 heridos, indicaron las autoridades.
El Comité de Investigación de Rusia dijo que el hombre llevaba una camiseta negra con "símbolos nazis". No se han dado detalles sobre sus motivos.
Se informó que estaba armado con dos pistolas de aire comprimido reconvertidas para disparar con munición letal y en los cargadores de la pistola, cuyas fotos fueron publicadas en redes sociales, se podía leer la palabra "odio" escrita con pintura roja.
Kazántsev, que se suicidó tras el ataque, estaba en el registro de pacientes de un psiquiátrico. Los investigadores rusos han practicado pesquisas en su domicilio para recabar más información.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, describió el tiroteo como "un acto terrorista'' y dijo que el presidente ruso Vladimir Putin ha dado todas las órdenes necesarias a las autoridades competentes.
"El presidente Putin lamenta profundamente la muerte de personas y niños en en la escuela, donde tuvo lugar un acto terrorista'', dijo Peskov a los periodistas.