El presidente de EU, Barack Obama, y la canciller alemana, Angela Merkel, analizaron hoy la situación en Siria y "respuestas potenciales" de la comunidad internacional para frenar la violencia en ese país, informó la Casa Blanca.
Durante una conversación telefónica ambos compartieron su "grave preocupación sobre el uso indiscriminado de armas químicas el pasado 21 de agosto en Siria", dijo en un comunicado la mansión presidencial.
"Ambos líderes coincidieron en que el uso de armas químicas es una grave violación de las normas internacionales y se comprometieron a continuar las estrechas consultas sobre respuestas potenciales de la comunidad internacional", puntualizó la Casa Blanca.
El anuncio de la consulta más reciente de Obama con líderes de la comunidad internacional se produjo poco después de que el Parlamento del Reino Unido, un estrecho aliado de Estados Unidos, rechazará una acción militar contra Siria.
La consulta de Obama con Merkel es importante, tomando en cuenta que el Gobierno alemán mantiene estrechos contactos con Rusia en busca de una solución política a la crisis en Siria.
Rusia y China, dos miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, se oponen a la intervención en Siria y hasta ahora no han cedido a las presiones de países como EE.UU., el Reino Unido y Francia, que apoyan un posible ataque militar.
Merkel pidió al presidente ruso, Vladímir Putin, que aproveche la negociación sobre Siria en la ONU para hacer posible una "reacción unánime" de la comunidad internacional contra el régimen de Bachar al Asad.
Así lo anunció el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Seibert, quien indicó que Merkel habló por teléfono con Putin para reiterarle que el ataque con armas químicas contra la población civil, atribuido al Gobierno sirio, exige una respuesta de la comunidad internacional.