Agregó que si Moscú observa pasos que atentan contra las normas internacionales vigentes, pensará "cómo actuar en el futuro, incluido lo que se refiere a los suministros de estos armamentos tan delicados a distintas regiones del mundo".
El jefe del Kremlin recalcó que la cooperación militar de Rusia con Siria no infringe el derecho internacional.
A la pregunta de si Rusia continúa suministrando armas y servicios a las fuerzas armadas sirias, Putin contestó: "Sí, por supuesto, y lo hacemos partiendo de la base de que colaboramos con un gobierno legítimo y de que no trasgredimos la normas del derecho internacional ni nuestros compromisos".
El presidente ruso recordó que la ONU no ha impuesto ninguna restricción a la ventas de armas a Siria y, al mismo tiempo, lamentó que, en contra de las normas del derecho internacional, la oposición siria recibe suministros de armas "desde el primer día del conflicto".