Jackson, de 49 años de edad e hijo del líder del movimiento de los derechos civiles Jesse Jackson, cumplirá ahora el resto de su sentencia en las instalaciones en una prisión localizada en la base Maxwell de la fuerza aérea en Montgomery, Alabama.
El traslado desde la prisión en Butner, Carolina del Norte, se hizo bajo total reserva y sin mayores explicaciones de la Oficina de Prisiones de Estados Unidos.
“Por razones de seguridad y privacidad, no indicamos las razones para la transferencia (de un reo)”, dijo al diario Chicago Tribune Ed Ross, vocero de la dependencia.
En agosto pasado un juez federal sentenció a Jackson a 30 meses de prisión por malversar fondos políticos para su uso personal. El político deberá además cumplir tres años de libertad supervisada al término de su encarcelamiento.
Junto con Jackson, su esposa Sandy fue sentenciada a 12 meses de cárcel por cargos separados pero relacionados con la ofensa que puso fin a la carrera política de su esposo, hasta entonces una de las jóvenes estrellas políticas entre los demócratas.
Jackson reconoció haber dispuesto para su uso personal de 750 mil dólares que recibió en donaciones para su última campaña política como congresista federal por Illinois.
Entre las adquisiciones hechas por Jackson con estos dineros figuran un reloj con un precio de 43 mil dólares, un sombrero que perteneció a Michael Jackson, así como pieles y el pago de vacaciones.