“El 30 de junio por la tarde regresaré a mis responsabilidades como alcalde de Toronto”, dijo el controversial funcionario en una carta enviada a la municipalidad de esta ciudad y divulgada aquí.
Ford es un político conservador de 45 años que ha protagonizado diversos escándalos desde que asumió el poder en diciembre de 2010, y que lo llevaron el pasado 30 de abril a pedir una licencia al cargo.
Varios videos han sido divulgados en los que se aprecia al alcalde en estado de ebriedad y gritando palabras altisonantes, además han sido publicadas fotografía de él con miembros de bandas relacionadas con el tráfico de drogas.
En noviembre de 2013, admitió haber consumido crack y haber asistido borracho a un evento público.
Cuando se ha visto presionado por las evidencias filmadas de su criticable conducta, Ford ha pedido perdón por “los errores cometidos” y ha declarado: “no soy perfecto”.
Sin embargo, continuaron apareciendo videos del alcalde bajo los efectos del alcohol y versiones de que se le ve en un video fumando una pipa con lo que parece ser crack.
Ford, acorralado por su conducta, admitió su problema de adicciones y pidió licencia al cargo el pasado 30 de abril.
“Tengo problemas con el alcohol y con las decisiones que he tomado”, admitió. Al día siguiente, se vio al corpulento funcionario salir de su casa con una maleta.
Tras dos meses de permanecer internado en el centro de rehabilitación para personas con problemas de adicciones GreenStone, en Bala, Ontario, el político regresa no sólo para retomar sus funciones como alcalde, sino para continuar su campaña hacia la reelección.
Toronto, considerada la capital financiera de Canadá, tendrá elecciones el próximo 27 de octubre y, pese a que la mayoría de los 44 concejales ha pedido su renuncia, Ford quiere seguir en el cargo.
La popularidad de Ford no se ha perdido del todo, ya que el carismático político aún tiene seguidores en el oeste de la ciudad (Etobicoke), donde vive, y cuyos vecinos lo defienden.
Ford no tiene todo el control de la alcaldía, pues al negarse a renunciar, la mayoría de los concejales votó en favor de dar mayor poder de decisión al vicealcalde, Norm Kelly.