Unos 150 agentes experimentados fueron enviados desde zonas menos activas al Valle del Río Grande, y otros 150 se les unirán a partir de una revisión de las operaciones en la región de la última semana, dijo Johnson, en un testimonio preparado para una audiencia en el Congreso este martes.
En el año fiscal que culminó en septiembre de 2013, los agentes estadunidenses encontraron a más de 24 mil niños sin acompañante en la frontera sur del país.
Desde octubre de 2013 y hasta mediados de junio de este año, aumentaron a más del doble superando los 52 mil, y las autoridades han estado evaluando cómo lidiar mejor con la crisis.
“Estamos hablando de grandes cantidades de niños, sin sus padres, que han llegado a nuestra frontera hambrientos, sedientos, exhaustos, asustados y vulnerables. Cómo tratamos a los niños, en particular, es un reflejo de nuestras leyes y nuestros valores”, manifestó Johnson en su testimonio.