Al otro lado del Atlántico, el estado de la economía no parece ser ahora mismo el problema. A pesar de una situación bastante mejor que en la eurozona, los votantes estadounidenses castigaron al Partido Demócrata del presidente Obama. Los mercados dieron la bienvenida a la conquista definitiva del Congreso por parte de los republicanos. Y esto pese al miedo a un atasco entre el Ejecutivo y el Legislativo, ahora completamente dividido.
Hablando de divisiones perdurables, obserbaremos hasta dónde han llegado los esfuerzos de reunificación en Alemania veinticinco años después de la caída del Muro de Berlín.