consideradas como activos de refugio como el yen.
La bolsa de Shanghái se desplomó un 8.5 por ciento, lo que arrastró a las acciones europeas -que perdieron más de un 2 por ciento- y al índice referencial S&P 500 de la bolsa de Nueva York, que bajó a un mínimo de más de dos semanas.
Analistas dijeron que los operadores que sufrieron pérdidas en los mercados accionarios probablemente compensaron cerrando sus posiciones cortas contra el euro, lo que ayudó a que esta moneda avanzara contra el billete verde.
El euro cotizó con un alza de un 1.04 por ciento contra el dólar a 1.10960 unidades, cerca de un máximo de dos semanas de 1.11295 unidades. El dólar cedió a un mínimo de dos semanas ante el yen de 123.010 unidades. Por la tarde, la moneda estadounidense operaba con una baja de 0.45 por ciento a 123.240 yenes.
Los sólidos datos de Alemania también beneficiaban al euro. La confianza de los empresarios alemanes mejoró en julio tras dos meses de caídas, mostró el lunes un sondeo, gracias al acuerdo alcanzado entre Grecia y sus acreedores.
Otro dato publicado el lunes mostró que un indicador de planes de inversión de empresas de Estados Unidos repuntó sólidamente en junio, lo que sugiere que el efecto de las reducciones de gastos de capital en la producción de manufacturas está comenzando a disiparse.
El mercado estará atento a la reunión de política monetaria de la Reserva Federal del 28 y 29 de julio en busca de señales sobre el momento de la próxima alza de tasas de interés de la entidad, que se espera fortalezca más al dólar.
El índice dólar, que mide al billete verde contra una cesta de seis monedas, caía un 0.73 por ciento a 96.538 unidades, cerca de su mínimo de sesión de 96.288 unidades, el nivel más bajo desde el 14 de julio.