Al menos, es uno de los aspectos que se puede leer entre líneas, de su reciente informe, Perspectivas de la Economía Mundial.
Raymundo Tenorio profesor e investigador de economía del Tecnológico de Monterrey, en entrevista radiofónica para el Punto Crítico, explica que en China no existe un organismo independiente como el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) como lo es en México.
Es decir, que en dicho país el buró político del Partido Comunista y el Gobierno son los que controlan el buró central.
“A los chinos no hay que creerles todo” agregó, según el especialista entrevistado esta coyuntura se presta para que puedan ejercer control sobre el desempeño de sus propias cifras.
Por esta razón el FMI entre líneas pone en duda esto, y lanza una alerta en que el consumo de materias primas que el país asiático hace al mundo, está decreciendo a mayor velocidad de lo que baja su Producto Interno Bruto (PBI).
“Es una buena relación de variables para poder deducir que los chinos no nos están diciendo la verdad acerca de esa desaceleración económica”, dijo el académico.
Además cabe mencionar, que el país asiático desde julio del año pasado a la fecha emitió 517 mil millones USD de sus reservas, por parte inversores que llegaron tanto del extranjero como internos, los cuales salieron a invertir en activos, en dólares.
¿Cómo le afecta a México?
No obstante, por la razón anterior mencionada tenemos esa demanda internacional creciente de dólares que le pega también al mercado mexicano.
Incluso el mismo Agustín Carstens Gobernador del Banco de México, es muy cauto para lanzar afirmaciones que pudieran poner nervioso a los mercados en México. Dice, que el golpe de una desaceleración china o de una baja en su mercado de valores puede ser más allá de lo previsto
“Este decrecer del 2.6 por ciento no quiere decir que este todo bien”, dijo Raymundo Tenorio especialista económico del Tecnológico de Monterrey.
Porque el gobierno se está viendo afectado en una fuente importante de sus ingresos que son los ingresos petroleros, -al menos por 167 días- que son lo que pudieron cubrirse de producción petrolera, pero los otros 200 días que se tenga que vender petróleo al mercado va a empeorarse la situación, y a esto se le atribuyen los precios que estamos viendo de 21 dólares por barril.
No obstante, nuestro gobierno ha recurrido nuevamente a una deuda externa 2 mil 250 millones de dólares en esta semana, que están autorizado “desde luego” por el congreso.