El ministro de Comercio de Nueva Zelanda dijo que funcionarios de los restantes miembros del TPP se reunirán en los próximos meses para discutir cómo salvar el tratado, que era visto en Asia como una forma de contrarrestar la creciente influencia de China.
Trump cumplió el lunes una promesa de campaña y firmó una orden ejecutiva para retirar a Estados Unidos del acuerdo TPP del 2015, distanciando a Washington de sus aliados en Asia.
El acuerdo comercial, que Estados Unidos había firmado pero no había ratificado, fue un pilar del giro a Asia del ex presidente Barack Obama. El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, lo promovió como un motor de reformas económicas, así como un contrapeso al auge de China, que no es miembro del TPP.
Australia dijo que China e Indonesia podrían llenar el vacío dejado por Estados Unidos. El TPP aún debe entrar en vigor y muchos países no lo han ratificado.
"La arquitectura original buscaba permitir que otros países se sumaran", dijo el martes el ministro de Comercio de Australia, Steven Ciobo, a la Australian Broadcasting Corporation. "Ciertamente sé que Indonesia ha expresado interés y habría espacio para China si podemos reformularlo", agregó.
Los 11 países restantes del TPP son Brunéi, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Perú, Singapur, Vietnam, Australia y Nueva Zelanda.
El ministro de Comercio de Nueva Zelanda, Todd McClay, dijo a Reuters en un comunicado enviado por correo electrónico que habló con varios funcionarios de países del TPP cuando asistió la semana pasada al Foro Económico Mundial en Davos y espera que se reunirán en los próximos meses para "evaluar cómo avanzar".
"El acuerdo aún tiene valor como un TLC (Tratado de Libre Comercio) con los otros países involucrados", dijo McClay, agregando que era el primer pacto comercial de Nueva Zelanda con Japón, Canadá, México y Perú.