El anuncio llega cuando México enfrenta el peor momento en años en su relación con Estados Unidos, su principal socio comercial, debido al discurso proteccionista del presidente Donald Trump.
La estadounidense Ford canceló en enero la construcción de una planta de 1.600 millones de dólares en el estado de San Luis Potosí en el noreste del país, en medio de amenazas de Trump de imponer un alto impuesto fronterizo a los automóviles producidos en México.
"Lograremos una inversión en su primera fase de más de 4.400 millones de pesos para ensamblar vehículos asiáticos en Ciudad Sahagún en el estado de Hidalgo y con ello la creación de 1.000 empleos directos y 4.500 indirectos", dijo el gobernador Omar Fayad en el evento de lanzamiento.
"Cuando no puedes ver solamente hacia el norte pues puedes ver al oriente", agregó Fayad, saludando la participación de inversionistas asiáticos.
La alianza servirá para ampliar la capacidad de la planta de Giant, que hasta la fecha ha producido camiones de la marca china FAW, para fabricar dos modelos de vehículos de tipo SUV de la marca JAC, explicó su director general Elías Massri.
El ejecutivo dijo que esperan iniciar la producción el 28 de marzo y que prevén ensamblar unos 1.000 automóviles en el primer año y alcanzar una meta de 10.000 unidades anuales para el 2021.
Los vehículos producidos por Giant tienen como destino los mercados de México, América Central y Sudamérica, precisó Massri. Las armadoras establecidas en México dirigen alrededor de un 80 por ciento de su producción al mercado estadounidense.
Giant Motors tiene como inversionista al magnate mexicano Carlos Slim, a través del Grupo Financiero Inbursa, que aportará parte del financiamiento del proyecto, precisó Fayad.