procedentes de Canadá, México y la Unión Europea, según el diario The Washington Post.
El periódico, que cita tres fuentes no identificadas, sostuvo que el presidente estadunidense decidió escalar su guerra comercial global debido a que se encuentra “frustrado” por el hecho de que sus socios comerciales no aceptaron sus demandas.
“Los impuestos a la importación podrían entrar en vigor tan pronto como este viernes”, precisó la versión del rotativo.
The Washington Post calificó la decisión de la administración Trump como una invitación a represalias por parte de cada uno de sus socios comerciales que han sugerido que van a levantar nuevas barreras a un abanico de productos estadunidenses.
El rotativo señaló que la decisión de la Casa Blanca tendrá probablemente un impacto inmediato sobre el comercio global en acero y aluminio particularmente entre Estados Unidos y Canadá, el principal abastecedor de acero foráneo a Estados Unidos.
Hizo notar sin embargo que el proceso de decisión interna continúa fluido y que en tres ocasiones el presidente ha sido persuadido de imponer los aranceles en el último minuto.
En abril pasado, la administración Trump extendió hasta el 1 de junio la exención a México, Canadá y la Unión Europea para la imposición de aranceles a sus exportaciones de acero y aluminio a Estados Unidos.
A mediados de mayo, el secretario estadunidense de Comercio, Wilbur Ross, indicó que el presidente Trump decidiría si extiende las exenciones arancelarias a México o Canadá, dependiendo del estado de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLCAN) .
La Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCC) hizo este miércoles un llamado al presidente Trump para desechar su plan de imponer aranceles a las importaciones de acero y aluminio, y advirtió que serían un impuesto a los consumidores estadunidenses.
“Estados Unidos no debe expandir los aranceles cuota a las importaciones de acero y aluminio a países adicionales a partir del 1 de junio, como se ha amenazado”, apuntó el vicepresidente de Asuntos Internacionales de la USCC, Myron Brilliant.
“Tal acción impactaría a los manufactureros estadunidenses con más altos costos, desaceleración del crecimiento del sector de la construcción y pondría frenos en la creación de empleos en ambas industrias clave”, señaló.
La cúpula empresarial estadunidense hizo notar que los precios del acero de su país ya son casi 50 por ciento más altos que aquellos de Europa y China, mientras que los precios del aluminio han sido “extremadamente volátiles”.
"Esta acción se agregaría sustancialmente a esos retos”, sostuvo Brilliant.