plantas de producción de vehículos eléctricos de transporte de pasajeros y de carga que utilizarían energía solar para su recarga.
Precisó que se trata de una empresa canadiense y una estadunidense, cuyos representantes visitaron México hace un par de semanas para explorar la instalación de sus plantas productoras, atraídas por la importante cantidad de sol que tiene el país, toda vez que las electrolineras serían alimentadas con celdas solares.
Agregó que también analizaron el importante potencial que tiene el país en cuanto a consumo de camiones y tractocamiones, así como su gran cantidad de tratados de libre comercio para la exportación.
Entrevistado luego de su ponencia en el 18 Foro Nacional de Transporte de Mercancías que organiza la Asociación Nacional del Transporte Privado (ANTP), que tiene lugar en este destino turístico, Martínez Madrid indicó que si bien no puede revelar la identidad de las factorías, aún no son conocidas en México y se espera que se concrete la inversión en los próximos meses.
“Quieren hacer la inversión para que los vehículos sean fabricados en México, utilizando tecnología que se desarrolle conjuntamente. Están empezando a explorar el lugar en donde pueden ubicar las plantas productoras”, dijo, al adelantar que uno de los estados es Quintana Roo por su cantidad de sol, principalmente.
“México tiene una cantidad enorme de sol; entonces, ellos quieren poner en las terminales de autobuses, por ejemplo, grandes espacios con celdas fotovoltaicas en donde estarían cargándose siempre las baterías. Entonces, llegaría el camión a que le cambiaran las baterías por unas ya cargadas, que estarían almacenadas para evitar largos tiempos de espera”, refirió.
Hasta el momento ambas empresas prevén producir aún México para el mercado interno, así como para exportación, por lo que incluso ya iniciaron visitas a los gobiernos locales para explorar el mercado de metrobuses y transporte de pasajeros.
Expuso que de acuerdo con la presentación de los empresarios, se trata de autobuses de pasajeros con autonomía de 400 kilómetros, es decir, que “pueden ir perfectamente de Cuernavaca a la Ciudad de México, y demás”.
En tanto, los vehículos de carga o tractocamiones serán pequeños, pero es un proceso que se va dando y finalmente se espera que fabriquen camiones de grandes cargas, apuntó.