financieros internacionales de capital, a través de la cual se colocaron dos mil millones de dólares de Bonos Globales con vencimiento en abril de 2029.
La dependencia dijo que con esta colocación, el gobierno federal establece un nuevo bono de referencia en el mercado de dólares a un plazo de 10 años, el cual otorga una tasa de rendimiento de 4.577 por ciento y una tasa cupón de 4.500 por ciento.
Se recibió una demanda total por la transacción de unos ocho mil millones de dólares, equivalente a 4.0 veces el monto emitido, y se contó con la participación de más de 320 inversionistas institucionales de América, Europa, Asia y Oriente Medio.
Esto demuestra el amplio interés del público inversionista por los instrumentos de deuda emitidos por el gobierno federal en los mercados internacionales, dijo la Secretaría de Hacienda en un comunicado.
Argumentó que tanto el nivel de demanda recibido como la diversidad de inversionistas que participaron en la transacción, reflejan la perspectiva positiva de la comunidad financiera internacional sobre la solidez de los fundamentos macroeconómicos de México.
Asimismo, subrayan el buen manejo de la deuda pública del gobierno federal, así como la buena comunicación que han tenido las autoridades mexicanas con el público inversionista tanto nacional como extranjero, afirmó.
Esta transacción está en línea con la estrategia de endeudamiento del gobierno federal, anunciada el pasado 14 de enero en el Plan Anual de Financiamiento 2019, donde se estableció que se recurriría a los mercados internacionales de manera complementaria y únicamente cuando estos ofrecieran oportunidades favorables de financiamiento, dijo.
La Secretaría de Hacienda apuntó que esta transacción le permite al gobierno federal alcanzar objetivos como mantenerse dentro de los límites de endeudamiento externo neto establecidos en el Paquete Económico 2019.
También brindar tanto mayor liquidez a su curva de rendimientos en el mercado de dólares como mayor eficiencia al proceso de descubrimiento de precios de otros emisores mexicanos, tanto públicos como privados, al establecer un nuevo bono de referencia a 10 años.