Gran Bretaña abandonó la UE el 31 de enero, pero ha habido pocos avances para un nuevo pacto comercial después de que finalizara un acuerdo de transición del statu quo en diciembre.
Las conversaciones, que se han estancado por la insistencia británica de que tiene total autonomía sobre las ayudas estatales y la pesca, se reanudarán el martes en Londres.
El ministro de Relaciones Exteriores francés, Jean-Yves le Drian, aseguró que era necesario llegar urgentemente a un acuerdo comercial y culpó del estancamiento en las negociaciones a la actitud de Gran Bretaña.
Johnson dirá que no tiene sentido pensar en los plazos más allá del 15 de octubre.
“Si no podemos ponernos de acuerdo para entonces, no veo que haya un tratado de libre comercio entre nosotros, y ambos debemos aceptarlo y seguir adelante”, asegurará el primer ministro, según comentarios publicados por su despacho.
Si no se llega a un acuerdo, Gran Bretaña tendría una relación comercial con el bloque como la de Australia, lo que sería “un buen resultado”, afirmará Johnson.
“Como gobierno nos estamos preparando, en nuestras fronteras y en nuestros puertos, para estar preparados”, afirmará. “Tendremos control total sobre nuestras leyes, nuestras normas y nuestras aguas para la pesca”.
En ese caso, Gran Bretaña estaría dispuesta a encontrar un acuerdo sensato con el bloque en cuestiones prácticas como vuelos, transporte de camiones o cooperación científica, según los extractos.
El negociador británico para el Brexit, David Frost, dijo el domingo que su país no temía una salida sin acuerdo a fin de año.
Johnson dirá que todavía se puede llegar a un tratado en base a un acuerdo de libre comercio estándar si la UE está lista para repensar su posición actual. “Pero no podemos y no vamos a comprometer los fundamentos de lo que significa ser un país independiente para conseguirlo”, dirá.