La corte suprema de Brasil confirmó este jueves la anulación de las condenas por corrupción contra Luiz Inácio Lula da Silva, lo que le restituyó al expresidente izquierdista el derecho a presentarse a las presidenciales de 2022. Ocho de los once jueces del Supremo Tribunal Federal (STF) apoyaron la decisión tomada en marzo por el magistrado Edson Fachin, quien determinó que el tribunal de Curitiba (sur) que condenó a Lula por dos causas y lo procesó por otras dos no tenía competencia para hacerlo y que el exmandatario debe ser juzgado nuevamente por la justicia federal en Brasilia.
Todas esas causas, en las cuales Lula -de 75 años- siempre se declaró inocente, están vinculadas con la investigación Lava Jato sobre sobornos pagados a políticos para obtener contratos en la estatal petrolera Petrobras.
La decisión del STF no torna a Lula inocente, pero abre la puerta para que el líder izquierdista desafíe en las elecciones de 2022 al presidente ultraderechista Jair Bolsonaro, su enemigo declarado, cosa que todavía no ha decidido.
En una las condenas, Lula fue declarado culpable por el exjuez Sergio Moro en 2017 de corrupción y lavado como beneficiario de un apartamento en el litoral paulista ofrecido por una constructora.
Tras ser condenado en segunda instancia, en 2018, estuvo detenido 18 meses y quedó fuera de la carrera presidencial ganada por Bolsonaro.