claves para hacer frente al delicado panorama económico global, subrayó hoy el secretario general de la ONU, António Guterres, en su intervención en el Foro de Davos.
En su intervención al inicio de la semana de conferencias virtuales que celebra el foro, el líder de Naciones Unidas subrayó que vivimos una etapa "enormemente difícil para las economías, las poblaciones y el planeta", marcado por la pandemia, los problemas en la cadena global de suministro y las tensiones geopolíticas.
Como consecuencia, "la recuperación se ha frenado y se ha perdido terreno que había costado mucho ganar en los objetivos de la Agenda 2030", afirmó el experto portugués.
Los dos últimos años de pandemia, agregó, "han mostrado de forma sencilla pero brutal que dejando poblaciones olvidadas perjudicamos a todos", ya que la falta de vacunas en muchos países favoreció la aparición de peligrosas variantes del coronavirus.
En materia medioambiental "no traducir las promesas climáticas en hechos nos ha condenado a un planeta más caliente, más volátil, con más catástrofes y más desplazamientos a causa de ellas", lamentó Guterres.
Todo ello, unido a la creciente desigualdad y la pobreza, "tendrá como consecuencia más descontento social y mayor violencia", advirtió el secretario general, quien pidió a los líderes empresariales participantes en Davos colaborar en los campos sanitario, financiero y medioambiental para paliar estos efectos negativos.
En lo sanitario, Guterres recordó que la tasa de vacunación contra la COVID es actualmente siete veces más alta en los países ricos con relación a las naciones africanas.
Ante ello, pidió a las naciones desarrolladas y la industria farmacéutica dar prioridad a la distribución de dosis que la Organización Mundial de la Salud gestiona mediante el programa COVAX.
En el campo financiero, el secretario general indicó que un 80 % de los fondos de recuperación durante la pandemia se han gastado en países desarrollados, mientras la solidaridad global "brilla por su ausencia" y muchas economías en desarrollo no logran ser aceptadas en programas de alivio de deuda pese a sus crecientes niveles de pobreza y desempleo.
En este sentido, "es urgente una reestructuración de la deuda y reformas a largo plazo del sistema de endeudamiento", afirmó Guterres.
En lo relativo al cambio climático, el máximo responsable de la ONU advirtió de que incluso si los países en desarrollo cumplen sus promesas de reducción de emisiones para 2030 ello podría no ser suficiente, debido a los gases de efecto invernadero que emiten las grandes economías emergentes (India, China, Rusia...).
"Necesitamos una reducción global de las emisiones del 45 % en esta década, pero con las condiciones actuales éstas crecerán un 14 %", alertó Guterres, quien recordó que los desastres climáticos obligaron a dejar sus hogares a 30 millones de personas, el triple de los desplazados por la guerra y la violencia.