bromea el coronel Oleksandr Saruba, del Centro de Investigación de Armas capturadas del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania, país en cuyo poder obran actualmente más de 800 armas y equipos rusos.
Hay sistemas de artillería, tanques, vehículos de transporte de personal y de muchos otros tipos. Hay incluso un contenedor en el que los soldados pueden ducharse y equipos utilizados en defensa aérea y en la guerra electrónica. Pero lo que más abundan son las armas "pequeñas", como ametralladoras y lanzagranadas, que se cuentan por miles.
Cuanto más rápido avance el Ejército ucraniano en su contraofensiva, más probable es que encuentre equipamiento ruso con daños mínimos. Según Saruba, los soldados rusos abandonan a veces equipos con defectos menores.
::: Obuses, municiones y muchos tanques :::
Durante la liberación de Izium, en la región de Jarkov, la brigada aerotransportada 95 de Ucrania capturó un sistema de lanzacohetes múltiple Grad. Así lo asegura un soldado de la misma brigada, apodado "Pirata". Primero hubo que reparar el sistema y ahora vuelve a estar en uso. En Izium, la brigada también capturó un obús tipo 2A65 "Msta-B" ruso y municiones apropiadas.
Los tanques rusos constituyen una parte importante de las armas capturadas. Actualmente, hay más de 300, lo que "sería suficiente para abastecer a diez batallones de tanques”, explica Oleksandr Saruba.
En la batalla, el Ejército ucraniano utiliza todos los tanques a su disposición: tanto los propios como los capturados. "El T-64 suena tan fuerte, que puedes escucharlo a tres o cuatro kilómetros de distancia, pero el T-72 es más silencioso, para que así puedas acercarte al enemigo, que no notará el tanque hasta el primer disparo", explica el conductor de tanques de la brigada, apodado "Chicago".
::: A la búsqueda de nuevas tecnologías :::
Pero las armas capturadas reutilizables no son los únicos trofeos. También sirven los equipos militares destruidos, escombros, restos de misiles y drones de combate y descripciones de los mismos, es decir, todo lo que le permite examinar las armas del enemigo y utilizar este conocimiento para desarrollar nuevas estrategias. Oleksandr Saruba explica que esta es una de las tareas de su centro.
También hay descubrimientos interesantes, como el sistema de reconocimiento ruso "Strelez", un ordenador distribuido por todo el chaleco de un soldado y conectado a un telémetro, un transmisor y un sistema de transmisión de información digital. Se puede utilizar directamente en el campo de batalla para el reconocimiento de objetivos y para la transmisión de datos en tiempo real.
Los vehículos rusos también proporcionan informaciones interesantes. Según Saruba, dado que la Federación Rusa cooperó con muchos países en la modernización técnica de sus armas antes de 2014, hoy los tanques y vehículos blindados de transporte de personal rusos disponen de electrónica moderna fabricada en otros países.