de una gran cantidad de aviones y buques de guerra procedentes de China, con un total de 68 cazas y 10 navíos del Ejército Popular de Liberación (EPL, Ejército chino) en las inmediaciones de la isla.
El Ministerio de Defensa taiwanés informó en un comunicado la presencia de las 68 aeronaves en las cercanías de la isla sobre las 06:00 hora local (22:00 GMT del miércoles).
Un total de 40 de ellas cruzaron la línea media del Estrecho de Taiwán, una demarcación no oficial aceptada tácitamente por Taipéi y Pekín en las últimas décadas, pero que los cazas chinos suelen ya rebasar desde hace un año en sus ya rutinarias incursiones.
La entidad castrense reportó el miércoles la incursión de 84 aviones chinos y 33 barcos de guerra desde el otro lado del estrecho en los tres días anteriores, lo que supone un aumento de la tensión que coincide con el reciente paso del portaaviones chino Shandong por las aguas al este del territorio.
El investigador local Chieh Chung, citado recientemente por la agencia isleña CNA, señaló que las constantes incursiones de los aviones del Ejército chino en la Zona de Identificación Aérea (ADIZ) taiwanesa tienen como objetivo "presionar y provocar a Taiwán", y que las más recientes son "una respuesta al tránsito por el estrecho de Taiwán realizado por un destructor estadounidense y una fragata canadiense el pasado sábado".
En agosto pasado, el ejército chino llevó a cabo ejercicios militares por mar y aire alrededor de Taiwán en respuesta a las escalas en Estados Unidos del vicepresidente taiwanés, William Lai -candidato a la Presidencia en las próximas elecciones-, al que acusó de "buscar el apoyo estadounidense para la independencia de Taiwán".
El Shandong, que se convirtió en 2019 en el segundo portaaviones del país asiático, estuvo presente en las maniobras militares que China organizó alrededor de Taiwán la pasada primavera para simular un bloqueo de la isla.
Taiwán se ha gobernado de manera autónoma desde 1949, aunque China reclama la soberanía sobre la isla, a la que considera una provincia rebelde para cuya "reunificación" no ha descartado el uso de la fuerza.