yenes (unos 416,9 millones de dólares), según informó hoy el Gobierno.
El saldo positivo contrasta con el déficit de 937.802 millones de yenes de agosto y el saldo negativo de 2,1 billones de yenes de septiembre de 2022, según los datos publicados por el Ministerio de Finanzas.
Las exportaciones japonesas crecieron un 4,3 % interanual el mes pasado, hasta 9,2 billones de yenes, mientras que las importaciones se redujeron un 16,3 %, hasta 9,1 billones de yenes.
Por países, Japón registró con China, su mayor socio comercial, un déficit de 570.957 millones de yenes, lo que supone un 1,3 % menos con respecto al obtenido un año antes.
Con la primera economía del mundo y su segundo socio comercial, Estados Unidos, el país asiático obtuvo un superávit de 955.073 millones de yenes, lo que supone un incremento del 58,1 % interanual.
Con la Unión Europea, su tercer socio comercial, Japón registró un déficit de 17.921 millones de yenes, un 90,3 % inferior al anotado en septiembre de 2022.
Con Brasil, el país asiático amplió su déficit un 0,5 %, hasta 89.407 millones de yenes, mientras que en el caso del saldo negativo con Chile se incrementó un 23,1 %, hasta 62.539 millones de yenes.
Japón logró, en cambio, un superávit comercial con México por valor de 110.181 millones de yenes, un 37,7 % más con respecto al año pasado.
El Ministerio de Finanzas japonés también publicó este jueves el informe de la balanza comercial correspondiente a la primera mitad del ejercicio fiscal nipón, que comprende entre abril y septiembre.
En dicho período, Japón registró un déficit comercial de 2,7 billones de yenes, un 75,1 % menos que en el mismo semestre de 2022.
Esto estuvo principalmente motivado por el recorte de las importaciones en dichos meses, del 12,4 % interanual, tras el gran aumento experimentado en los años influidos por la pandemia de covid y coincidiendo con un abaratamiento del yen que ha estado lastrando las finanzas del país, altamente dependiente de ciertas compras.
Las importaciones niponas entre abril y septiembre de 2023 totalizaron 52,96 billones de yenes, mientras que las exportaciones se situaron en 50,24 billones de yenes, un incremento del 1,4 %.