La desaceleración de la gigante China y de su apetito por las materias primas que compra de la región, y una esperada normalización de la política monetaria en Estados Unidos, son dos de las razones que van a pesar en el crecimiento de la región, que el año pasado se expandió un 3 por ciento.
"Las noticias económicas y financieras en los seis meses previos confirman que los factores externos que impulsaron la actividad en Latinoamérica y el Caribe en la década pasada continúan retrocediendo", dijo un reporte semestral del Banco Mundial sobre los países que conforman la región.
El organismo se sumó al Fondo Monetario Internacional (FMI), que también recortó el martes su estimado de crecimiento para Latinoamérica ante la elevada dependencia de los precios internacionales de las materias primas.
Para las dos grandes economías de la región, Brasil y México, el Banco Mundial espera un crecimiento económico del 2,4 y del 1,5 por ciento respectivamente.
"Brasil está en aprietos para reavivar su actividad económica después de que su economía registró un leve 0,9 por ciento (de crecimiento) en el 2012", dijo el Banco.
México ha sufrido una desaceleración de su economía en los dos primeros trimestres a pesar de las reformas lanzadas por el Gobierno y tras un robusto crecimiento del 3,9 por ciento en el 2012, dijo el organismo.
De otro lado de la balanza, el Banco Mundial destacó que los dos países con mejor desempeño en la región serán Panamá y Perú, que crecerían un 8,0 y un 5,5 por ciento respectivamente.
Otros países como Chile, Colombia, Ecuador, Costa Rica, Guatemala y Uruguay continuarían superando el promedio regional con tasas de crecimiento de entre el 3 y el 4 por ciento.
Pero naciones como Venezuela y Jamaica registrarían un ritmo de expansión cercano o por debajo del 1,0 por ciento.