La balanza comercial de bienes también fue negativa en el periodo enero-septiembre, con un déficit de 1.012,9 millones de dólares. Pero la cifra representa una leve mejora desde los 1.570 millones del mismo lapso de hace un año.
En los primeros nueve meses de este año, las exportaciones subieron un 5,6 por ciento a 7.067,2 millones de dólares frente al mismo periodo del 2012. Las importaciones, en cambio, retrocedieron un 2,2 por ciento a 8.080,2 millones de dólares.
IMPORTAN MÁS MAQUINARIA
Uruguay exportó en septiembre 32,5 millones de dólares en arroz, un 51,4 por ciento menos que un año antes, y los envíos de cereales -principalmente la soja- cayeron un 33 por ciento interanual hasta los 66,3 millones de dólares.
Las exportaciones de carne y despojos comestibles también cayeron un 21,2 por ciento a 107,7 millones de dólares.
Del otro lado de la balanza, la importación de maquinaria y equipos se incrementó un 24,9 por ciento a 126,8 millones de dólares y la adquisición de automotores cayó un 41,5 por ciento a 36,4 millones de dólares.
La importación de alimentos y bebidas subió un 35,4 por ciento a 62,2 millones de dólares.
Pero el incremento más notorio fue en las compras de petróleo y destilados, que treparon un 95,2 por ciento en septiembre a 311,3 millones de dólares.
Gracias las lluvias que abastecieron a las centrales hidroeléctricas, Uruguay no tuvo que importar energía eléctrica.
Brasil y China fueron en septiembre los principales compradores de Uruguay, con 173,4 millones y 118,4 millones de dólares respectivamente. Les siguió el bloque comercial del Mercosur, que adquirió 297,2 millones de dólares.
La economía uruguaya, que está basada en la actividad agrícola-ganadera y el turismo, creció un 5,6 por ciento interanual en el segundo trimestre del año y las autoridades proyectan una expansión de un 4 por ciento para el 2013.
El déficit comercial de bienes registrado por el país en el 2012 fue de 1.968,8 millones de dólares.