La desaceleración resultó más grave de lo que se esperaba, pero se prevé un rebote con el mejoramiento del clima.
El Departamento de Comercio dijo que el crecimiento se redujo a 0.1 por ciento anual en el trimestre enero-marzo, el más bajo desde el fin de 2012 e inferior al 2.6 por ciento registrado en octubre-diciembre.
El gasto de consumo aumentó 3 por ciento. Pero esta alza fue impulsada por un aumento de 4.4 por ciento del gasto en servicios, reflejo del alza de las tarifas. El gasto en bienes casi no aumentó. Además, cayó la inversión en negocios, aumentó el déficit comercial y bajó la construcción de viviendas.