El diputado Roberto Jiménez del Ángel (NA) aseguró que en México hace falta legislar en materia de salud mental y dijo que poco se ha avanzado en el tratamiento de ese tipo de padecimientos, al inaugurar en San Lázaro la Jornada de Salud Mental “psicología, instituciones y sociedad”.
“Culturalmente en nuestro país poco hemos avanzado en el tema de la prevención de salud mental y, aunque a nivel de investigación internacional México ha sobresalido, tendríamos que hacer un esfuerzo, pues falta legislar en el tema”, destacó.
Jiménez del Ángel señaló que, de acuerdo con un estudio de Eduardo Ángel Madrigal de León, director de Servicios de Atención Psiquiátrica de la Secretaría de Salud (SS), para resolver el actual rezago en la materia se necesitan al menos 20 años.
Además, se requieren seis mil psiquiatras más, un mayor presupuesto y todo un cambio en la atención del paciente, indicó y subrayó que se estima que uno de cada tres habitantes del país sufre o tendrá un trastorno psicológico en el transcurso de su vida.
Héctor Armando Murguía Guitrón, integrante del Colegio de Profesionales de la Psicología del estado de Jalisco, expuso sobre “El Derecho a la Salud Mental ¿exigencia o justicia?”, y dijo que el tema constituye un “serio problema” nacional e internacional y que no ha sido correctamente abordado en el país.
“Como consecuencia de la existencia de un marco normativo deficiente, las políticas en materia de salud mental no han cubierto en su totalidad las obligaciones del Estado mexicano, respecto de las personas con padecimientos mentales”, explicó.
Murguía Guitrón propuso 11 estrategias para un desarrollo activo y efectivo del derecho a la salud mental, entre los que destacan actualizar la regulación en salud mental y psiquiátrica, integrar programas de promoción y prevención de trastornos mentales e integrar la atención en salud mental a la red de servicios de salud general.
“Es necesario que el Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo realicen tareas de análisis de instrumentos internacionales en la materia, para adecuar correctamente la legislación nacional y las políticas públicas”, expresó.
Miguel Ángel Castillo, presidente del Colegio Mexicano de Psicología Forense (COMPSIFO), expuso el tema "La juventud al borde del abismo” y detalló que no se debe etiquetar a los jóvenes, ya que actualmente “pareciera ser” que éstos son una amenaza para el sistema, a quienes habría que vigilar y controlar.
“No se puede etiquetar a los jóvenes y considerar que son impertinentes o considerarlos como un estorbo para el sistema, o para la comodidad del Estado”, consideró.
Afirmó que las condiciones excluyentes en el ámbito laboral y educativo, la pobreza y la marginación, generan en los jóvenes efectos psicológicos negativos como frustración, depresión y ansiedad.
“Se devasta su autoestima, además esto incrementa la agresión hacia los demás y a sí mismos, los lleva a cometer prácticas autodestructivas y consumir alcohol y drogas”, agregó.