Al reunirse con padres de familia que solicitan el uso terapéutico de la Marihuana, el presidente de la Cámara de diputados, Jesús Zambrano Grijalva, dijo que es la primera ocasión en que las dos cámaras suman esfuerzos para discutir un tema sumamente
polémico, por todas las implicaciones y reacciones que se han dado.
Zambrano Grijalva, aseguró que existen amplias posibilidades de que se logre la legalización de la Marihuana, por lo que se pronunció a favor de que las audiencias públicas organizadas por el Congreso de la Unión , para las alternativas para la regulación de la cannabis, tomen en cuenta el uso medicinal de la planta, levantando su prohibición.
Externo su preocupación por que vaya haber obstrucción por quienes actualmente están en el gobierno, porque tienen las bancadas más grandes en ambas cámaras. Pero recordó que en la pasada sentencia de la Corte sobre el uso lúdico, abrió una franja de discusión respecto a la protección de derechos humanos individuales.
En la reunión, Raúl Héctor Elizalde, padre de Graciela Elizalde, quien padece epilepsia, dijo que es urgente legalizar el uso medicinal de la marihuana, pues la salud es un derecho que no debe someterse a debate. Después los padres de familia entregaron a Jesús Zambrano una carta con 150 firmas con referencias médicas acerca de su uso terapéutico y pidieron el apoyo que esta reforma se impulse en el Congreso.
Por su parte, Roberto Gil, Zuarth, presidente del Senado, dijo que más que un uso lúdico de la marihuana, y legalizarla o no, no debe ser el objetivo, sino ser un objetivo más moderado y modesto. Busquemos con sensatez, pidió, con la razón de las políticas públicas, esas alternativas regulatorias para resolver algunos de los problemas que están asociados al mercado ilícito de las drogas.
En el tema de las drogas y de la marihuana, “debemos aproximarnos desde la perspectiva científica-objetiva a modalizar los efectos, los daños que pueda generar el consumo de estupefacientes, específicamente de la marihuana. Destacó que la modificación de la Ley General de Salud, no ha eliminado ni reducido la política de penalización a los consumidores, y eso, genera un efecto social, porque un consumidor no debe estar en la cárcel desprendido de su familia.