El gobierno federal debe ejecutar medidas de austeridad en todas sus dependencias, para destinar los recursos obtenidos a la inversión pública, para no despedir a 10 mil empleados de Pemex y 15 mil de otras áreas del sector público. Señaló el presidente de la
Cámara de Diputados, Jesús Zambrano Grijalva, al tiempo de demandar al Gobierno de la República que explique públicamente lo que hará frente a la situación de emergencia que enfrenta la economía nacional.
Expresó que de acuerdo a señalamientos de especialistas, fortalecer el salario mínimo y considerar la desaparición de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, podría dar la oportunidad para incentivar el mercado interno y sacar adelante a la economía nacional, así como mejorar las políticas públicas, pese al modelo económico que se ha adoptado.
El legislador federal coincide con expertos en la materia, en que esta situación “no es irremediable ni fatal”, y lo que procede es empezar a reorientar el modelo de desarrollo que se ha seguido en las últimas décadas. Dijo que la ciudadanía no puede conformarse con el argumento del Secretario de Hacienda, Luis Videgaray, de que “es resultado del contexto internacional” y resignarse a padecer las consecuencias.
Jesús Zambrano explica “Ha quedado en evidencia más de una vez que lo que ocurre con nuestro país es consecuencia no sólo de las circunstancias internacionales, sino del modelo de crecimiento al que se le apostó y que ha mostrado recurrentemente sus debilidades, una de ellas, la fuerte dependencia del sector externo”.
Declaró que tampoco es aceptable lo dicho por la titular de la Sedatu, Rosario Robles, cuando pidió no preocuparse por la caída del peso frente al dólar ni por la baja en el precio del petróleo, porque -según ella- tenemos otras fuentes importantes de ingreso como los dólares que mandan los paisanos desde el otro lado de la frontera, calificó de lamentables y desafortunadas estas declaraciones que revelan que nuestro país experimenta un revés, que hoy los mexicanos generen más para el país trabajando fuera, que dentro de él y el gobierno “no puede pensar en una estrategia de desarrollo viable basada en las remesas, no son la alternativa”.
También sugirió poner especial atención en las asignaciones presupuestales para el 2017 donde no se deberá repetir lo hecho para este 2016 cuando se aprobó una reducción de los presupuestos para Pemex y la Comisión Federal de Electricidad, aun cuando son elementos de inversión pero que al afectarlos, se ha perjudicado el desarrollo del país y a su capacidad de crecimiento a futuro.