El éxito de las políticas antidrogas requiere de un sólido compromiso internacional, además de un enfoque balanceado, integral y de estrecha coordinación, afirmó Tomás Zerón de Lucio, director en jefe de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).
Al inaugurar el Taller para la Identificación de Objetivos Regionales, destacó que el fenómeno de las drogas insta a las autoridades a enfrentar de manera sistemática a los grupos delictivos organizados, cada vez más complejos y versátiles, que no conocen las fronteras.
A su vez, el encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos en México, Donald Jacobson, aseveró que el gobierno de ese país será el mejor aliado en ese esfuerzo de cooperación regional antidrogas.
“Este flagelo representa grandes retos para nuestras sociedades, sólo de manera coordinada podremos enfrentar todos los problemas ligados al narcotráfico, por ello ofrezco todo el apoyo que sea necesario para fortalecer y hacer más eficiente esta labor”, apuntó.
En su oportunidad, Paul Craine, director regional para Norte y Centroamérica de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), reiteró la necesidad de identificar y desarrollar planes y operaciones multilaterales que permitan desmantelar a las organizaciones de drogas más importantes de la región.
“Nuestras regiones de Norte y Centroamérica enfrentan algunos de los temas más desafiantes de cualquier región en el mundo en relación con el tráfico de drogas ilícitas”, enfatizó.
La Procuraduría General de la República (PGR) informó en un comunicado que en este taller participan Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala, Belice y Canadá, así como los representantes regionales de la DEA.
La dependencia precisó que durante dos días los asistentes analizarán el problema de las drogas, su comportamiento y las políticas nacionales para su atención integral en la zona.
Señaló que el Taller para la Identificación de Objetivos Regionales tiene la finalidad de proyectar un impacto generalizado en la región, en virtud de que el tráfico de drogas representa una amenaza latente a la seguridad de las naciones.