El Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó cinco medidas de austeridad en apoyo a la coyuntura económica que vive el país, entre ellas, la suspensión de la construcción de su nueva sede.
Los recursos destinados para dicha obra, que ascienden a mil 70 millones de pesos, serán puestos a disposición de las autoridades hacendarias para que determinen su asignación en áreas prioritarias de gasto del estado.
En rueda de prensa, el consejero presidente, Lorenzo Córdova, informó que se acordó también una reducción a las remuneraciones de las y los consejeros electorales, así como de los integrantes de la Junta General Ejecutiva ampliada, equivalente a 10 por ciento.
Además, se determinó dar marcha atrás a la prestación de telefonía celular y cada uno de ellos asumirá sus gastos y para reforzar la política de transparencia y rendición de cuentas, el INE hará público el ejercicio de su presupuesto cada trimestre.
Córdova Vianello precisó que la Junta General Ejecutiva aprobará y presentará al Consejo General en febrero próximo un conjunto adicional de medidas de austeridad, racionalidad y economía en el ejercicio del gasto que puedan significar economías adicionales para las finanzas públicas del país.
Acompañado por las y los consejeros electorales, indicó que como un organismo autónomo, el INE no es ni puede ser ajeno a los desafíos que aquejan al país ni permanecer al margen de las exigencias para afrontar con la máxima sensibilidad y responsabilidad el momento que atraviesa el país.
En tal sentido, resaltó que sin dejar de atender a cabalidad todas y cada una de las responsabilidades que la Constitución y las leyes le han encomendado al organismo autónomo electoral, tomó estas decisiones en aras de contribuir al uso de los recursos públicos en áreas socialmente prioritarias.
Al abundar sobre la suspensión de su nueva sede de Viaducto Tlalpan, explicó que se concluirá la etapa de planeación ya en curso del plan de inversión inmobiliaria, consistente en la elaboración del Proyecto Ejecutivo.
Lo anterior, “a efecto de que, junto con el Plan Maestro finalizado en 2016, sean un insumo disponible para cuando, si un contexto económico favorable del país lo permite, se realice la edificación planeada”, añadió.
El titular del INE dejó claro que con esas cinco medidas, el órgano electoral ratifica su compromiso como institución del Estado mexicano al servicio de la democracia, al resaltar que sólo en democracia y en paz, México mejorará su actual situación.
A los 19.9 millones de mexicanos que están convocados a las urnas en los estados de México, Coahuila México, Nayarit, así como Veracruz, que representan la cuarta parte del padrón electoral nacional, les garantizó que podrán votar para definir quién los gobierna y los representa.
El consejero presidente del INE recordó adicionalmente que en de septiembre próximo arranca formalmente el proceso electoral federal 2017-2018, con el que se renovarán el Congreso de la Unión y la Presidencia de la República.
Refirió que las elecciones deben ser un espacio para la renovación de la democracia, de confirmación de la coexistencia política pacífica en una sociedad compleja y diversa, al resaltar que el INE no cejará en su misión de asegurar elecciones libres, equitativas y auténticas.
Además, concluyó, asegurará la vigencia irrenunciable del sufragio efectivo para que sea, precisamente la ciudadanía, ejerciendo sus derechos y libertades, la que defina constructivamente el destino de la nación.
Durante el posicionamiento del INE, efectuado en la sala de prensa del organismo, estuvieron presentes los consejeros Marco Antonio Baños, Adriana Favela, Arturo Sánchez, Pamela San Martín, Beatriz Galindo, Santiago Castillo, José Roberto Ruiz y Ciro Murayama.