Ciudad de México, 10 de noviembre 2020, - Por si algo le faltara al Secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch es que funcionarios menores, abusen del poder que les otorga ser jefes de unidad y cometer todo tipo de abusos en sus derechos laborales y humanos contra trabajadores, tal como ya se hizo público los hechos sucedidos en la Unidad Departamental de Equipos de Radiocomunicaciones, ubicada en Sidar y Rovirosa 169, colonia El Parque a cargo de Gustavo Guerrero Cuevas, sobrino del ex jefe policiaco Joel Ortega Cuevas.
En ese lugar se registraron los hechos de acoso sexual a cargo de César Antonio González González, quien detenta el cargo de la Jefatura de la Unidad Departamental de Equipos de Radiocomunicaciones, en contra de la trabajadora policía con iniciales de su nombre M.M.I, por medidas de seguridad y cautelares, admitidas por la Asesor Jurídico Público Nancy Gallardo Rodríguez, como consta en la querella interpuesta en la Fiscalía de Investigación de Delitos Sexuales, Agencia Investigadora del Ministerio Público FDS-6, Unidad de Investigación No. : FDS-6-01, en la Carpeta de Investigación No. CI-FIDS/FDS-6/UI-FDS-6-01/01201/10-2020, donde estipula Persona Agresora Servidor Público.
Esto registrado en el documento entregado a este reportero, señalando los hechos en esa Unidad de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, a cargo del Secretario Omar García Harfuch, quien ha señalado el respeto a las mujeres trabajadoras en esa institución y cuya imagen está enturbiada por servidores públicos “menores” que se ufanan ante sus allegados de tener “protección” para operar en la impunidad y la corrupción.
El proceso sigue su curso, y la trabajadora enfatizó que lo único que busca es frenar este tipo de abusos contra las mujeres trabajadoras que se encuentran en estado de indefensión, ante el poder que detentan funcionarios que se siente dueños de “vidas y almas” al estilo feudal, por lo que confía en que la Fiscalía Investigadora de Delitos Sexuales, actúe en el marco de derecho para poner un alto a los atropellos de los derechos laborales y humanos de las trabajadoras y trabajadores en general.
“HUACHICOLEO” Y NEGOCIOS CON REPARACIÓN DE RADIOS DE POLICÍAS.
Con esta denuncia también se destapó la “cloaca” que impera en esa Unidad de Equipos de Radiocomunicación, donde empleados enviados por sus jefes extraen gasolina a las patrullas de servicio para ponerla en los autos particulares de los “Jefes”, tal como se observa en un video entregado a este reportero, lo cual es una práctica cotidiana sin que autoridad alguna ponga alto a estas acciones anómalas.
Pero también están los “moches” que entregan los policías a fin de que les reparen de inmediato sus equipos de trabajo y que caen en las garras de la Unidad Departamental de Equipos de Radiocomunicaciones, a cargo de César Antonio González González, en un diálogo de whatsapp, que da cuenta de los negocios en esa área de la Secretaría de Seguridad Pública.
El diálogo se reproduce de esta manera:
“….Jefe, buena tarde, disculpa por comunicarme hasta hoy, fui pero me dijeron que tenías un problema, sólo era para avisarte que te dejo 1,500, con tu chavo, ya me dio los equipos, pero me dijo que se iba a parar”.
R: “….Sí cabrón, fíjate que me iba a quedar con el almacén, pero ahorita no creo que se pueda, ya me lo dio, ahorita por el momento no va haber nada”.
Continúa : “…Mañana cuando llegues me avisas y mando a alguien por ti, porque ya ves que ya no los dejan entrar”.
Policía: “…Sí ya sé, pero pues tú eres amo y señor, Tú Papá hace lo que tú dices”.
Funcionario:”…No te creas carnal, las cosas están pesadas, pero ahora que ya tome el control de todo, pero sí sin falla, a qué hora llegas?”.
Policía: “..creo que como a las 9”
Funcionario: “..Bueno , te mando a alguien por ti”
Y continúa: “..” qué pasó patrón, cómo estás?, espero no interrumpir”.
Funcionario: “…Dime, qué pasó”.
Policía: “..Oye ya te puedo llevar mis equipos”
Funcionario:”…Ya ingresaste tu oficio”.
Policía: “..qué pasoo´, ya me vas a desconocer”,
Funcionario: “…Ahorita no, las cosas están muy calientes”.
Policía: “…Pero si me los vas a trabajar, ya sabes que no me doy por mal servido”.
Funcionario: “..Cuántos son?”.
Policía: “..son 15”.
Esto es el modus operandi en esa unidad de la SSC, donde dicen los trabajadores “…no ha llegado la limpieza de la corrupción”, muchos de ellos entrevistados señalaron tener temor por las represalias que pueden venir, porque reconocen que Gustavo Guerrero Cuevas, está bien “parado” y ninguna autoridad de alto mando le hecho una investigación, además de que sus allegados operan con total impunidad, señalaron que la trabajadora policía que denunció a César Antonio González González, es uno de tantos casos que suceden en la unidad, porque el tráfico de influencias y el compadrazgo sigue siendo el signo de la corrupción en las filas de la policía.