Desde 2004, el juego ha sido oficialmente legal en el país de México y con las regulaciones en 2014, los
juegos de casino online fueron oficialmente permitidos. El requisito previo es una licencia de juego emitida por el Ministerio del Interior y la Autoridad de Juegos y Sorteos. A continuación analizaremos con más detalle lo que esto significa para el sector y por qué México no deja de ser importante para el mercado internacional.
La historia del juego en México: un largo viaje al pasado
México es uno de los países más ricos en tradición en lo que se refiere a diversos tipos de juegos de azar. Según la leyenda, los aztecas y los mayas ya jugaban y hacían apuestas con regularidad. Aquí tenían especial importancia las polémicas peleas de gallos, sobre las que la población hacía apuestas. En 1974 se prohibieron los juegos de azar; el Presidente Miguel Alemán Valdés probablemente decidió hacerlo por influencias de la política y la Iglesia católica. El cambio no volvió a entrar en vigor hasta 2004. En ese año, se permitieron todos los juegos de azar en el país, siempre que se ofrecieran de forma adecuada y con licencia.
A través del ejemplo estadounidense ( Las Vegas), los mexicanos saben que el juego atrae no sólo a clientes nacionales, sino también a turistas del extranjero. Con la legalización, se produjo un boom y se abrieron numerosos casinos. A día de hoy, el punto fijo está en el norte de México, ya que aquí florecen los turistas procedentes de Estados Unidos. Esto supuso una bonanza para la economía del país, ya que la creación de nuevos locales de juego también proporcionó muchos puestos de trabajo.
En 2004, sólo se legalizaron las instalaciones de juego terrestres; en aquel momento no había regulación para el creciente mercado digital. Después, en 2014, hubo que hacer una nueva revisión para promover y apoyar también esta industria. Una vez más, hubo beneficios económicos para el país, ya que el sector del juego online volvió a crear nuevos puestos de trabajo que los mexicanos tanto necesitan. El corazón de la regulación late en la Secretaría de Gobernación, donde se lleva a cabo la regulación de todo tipo de juegos de azar.
Cómo se expiden las licencias de juego en México
Para obtener una licencia oficial, las empresas de juego deben solicitarla a la Dirección General de Juegos y Sorteos, dependiente de la Secretaría de Gobernación (SEGOB). La licencia propiamente dicha sólo se concede a empresas del país o a personas físicas de ascendencia mexicana. Los operadores extranjeros tienen la posibilidad de entrar en el mercado como socios comerciales. Las empresas con residencia oficial en México pueden solicitar licencias en las siguientes áreas:
- Apuestas deportivas: Esta licencia permite al negocio ofrecer apuestas en eventos deportivos legales como peleas de gallos, carreras de perros y carreras de caballos.
- Licencias temporales: Se puede solicitar una licencia para juegos de cartas de corta duración, juegos de feria y apuestas deportivas temporales, que tiene una validez de 28 días. Está reservada exclusivamente a los mexicanos.
- Licencias de casino: La licencia oficial de casino permite publicar oferta terrestre y digital. Siempre que la SEGOB conceda una licencia adicional, se permiten las cooperaciones y asociaciones con empresas sin licencia (por ejemplo, del extranjero). Un requisito para la ampliación es que la gestión sea responsabilidad del titular de la licencia.
- Licencia especial en línea: Oficialmente, la licencia se aplica a los juegos clásicos de máquinas tragaperras, pero extraoficialmente cubre todas las actividades digitales disponibles en internet. Esto incluye los casinos en línea clásicos, pero también las apuestas deportivas.
- La licencia es válida durante 25 años, tras los cuales puede renovarse por 15 años. Si una empresa ya recibió una licencia de las autoridades antes de 2013, el plazo es de 40 años.
Requisitos para el juego legal en México: qué deben cumplir los operadores
La legalización del mercado vino acompañada del deseo de ofrecer un juego seguro y transparente para mexicanos y turistas. Para obtener una licencia, las empresas o particulares deben cumplir numerosos requisitos y documentarlos ante las autoridades. Entre ellos figuran pruebas de identidad y ciudadanía, pero también documentos relativos a la situación financiera y a cualquier préstamo en curso. Los titulares de licencias no deben tener condenas previas ni declaraciones de quiebra. Sólo si se cumplen estos criterios puede expedirse la licencia. El plazo de tramitación es de unos diez días para los casinos en línea y de unas 12 semanas para los locales de juego en tierra si se presentan todos los documentos importantes.
Una vez expedida la licencia, está sujeta a controles permanentes. Las ofertas en tierra, por ejemplo, sólo pueden ofrecerse dentro de los límites permitidos. Si la empresa quiere abrir otro establecimiento de juego o trasladarse, el ministerio debe expedir otra licencia. Los operadores de juego deben garantizar una distancia de al menos 200 metros de las escuelas y otros centros educativos. Si el titular de la licencia incumple los requisitos de la legislación mexicana, la licencia puede ser revocada y se le pueden imponer fuertes multas.
No al blanqueo de dinero en México: estrictas normas reguladoras para un mercado con buena reputación
Las medidas preventivas especiales relativas al blanqueo de dinero se aplican a los juegos de azar digitales y terrestres. Por ejemplo, los operadores de casinos están obligados a comprobar la identidad de todos los participantes y a registrarlos. Si un casino terrestre quiere ampliar su oferta digitalmente, debe demostrar que dispone de un mecanismo de control que funcione sin problemas. Deben descartarse los intentos de manipulación y fraude, y el casino debe ser justo, honesto y transparente en el trato con sus clientes.
México sigue luchando contra las ofertas ilegales de juego, especialmente las máquinas tragaperras son un problema. La autoridad tiene la tarea de vigilar que las máquinas tragaperras se instalen legalmente y cumplan la ley. Por ejemplo, hay que garantizar que los menores jugadores no tengan acceso. Periódicamente, la policía del país realiza redadas y destruye las máquinas de juego no autorizadas.
Para mantener la seguridad de los jugadores, los casinos no pueden conceder créditos de ningún tipo. Si las deudas fueron causadas por el uso de tarjetas de crédito, las empresas mexicanas autorizadas pueden emprender acciones legales para reclamar su dinero. En caso de infracción de las leyes aplicables, las autoridades actúan con rapidez y revocan la licencia del operador correspondiente. En el pasado, se impusieron multas en repetidas ocasiones y no se renovaron las licencias.
Conclusión: un mercado claramente regulado en México, que atrae a los turistas
Debido a su proximidad con Estados Unidos, el mercado del juego en México es más importante de lo esperado. En el norte del país, los turistas siguen cruzando la frontera para visitar casinos terrestres y apostar. Según el estado, el juego está estrictamente prohibido en Estados Unidos, pero la buena regulación en México atrae a los turistas. Esto, a su vez, tiene un efecto positivo en la economía, ya que la industria turística proporciona muchos puestos de trabajo. En comparación con otros países, México ha establecido una política de juego estricta, restrictiva pero justa, que sirve principalmente para proteger a los jugadores.